En momentos como estos, solo deseo como patio: el mar…
solo un patio... no más, y aquella fachada rota, manteniéndose en pie para no caer...
a la cual el mismo ayuda con su viento a enderezarse nuevamente y tomar otro matiz con cada grano de arena que choque con su superficie y se quede capturado...allí,
en ese muro tan fuertemente erigido al principio,
y cuya resistencia se ha visto tan afectada por las tormentas pasadas...
Quedara siempre ese espacio inaccesible a especie humana alguna....
si...porque me han parido en el lugar equivocado y conmigo, a una dimensión aparte,
diferente a este mundo en el que he tratado de sobrevivir...
dejando mi interior quedar externamente expuesto aquellos ojos que no lo puedan ver jamás.